Todo comienza en la oficina donde trabajo, era un día normal y corriente. En un descanso salimos a la calle y, mientras algunos compañeros fumaban, charlábamos tranquilamente, era de noche. Cuando pasó un rato todos comenzaron a mirarme; había un puntero láser apúntandome a la cabeza desde arriba, desde algún punto lejano en el cielo.
Ante tal evento mis compañeros apuntaron con un foco al cielo, hacia el lugar donde supuestamente salía ese rayo. Una especie de helicoptero mezclado con drone estaba sobrevolando la zona y manionbrando sobre la zona. Hasta que decidió aterrizar a nuestro lado.
Varias personas vestidas con trajes blancos ajustados se acercaron a nosotros. Decían que tenía que ir con ellos y que podría coger unas pocas cosas de la oficina, pero no me daría tiempo a despedirme de nadie más. Entonces subí a ese vehículo y por dentro era enorme. Había decenas de laboratorios y zonas de entrenamiento militar y deportivo. Me estuvieron enseñando como tenían monitorizado todo sobre la faz de la Tierra. Y después me hicieron sentarme en una silla con un ordenador para intentar comunicarme con mis conocidos.
Poco tiempo después me dijeron que era momento de entrenarme. Me llevaron a una sala enorme en la que había mucha gente haciendo ejercicio y me dijeron que me pusiese ropa deportiva ajustada. Mientras miraba a unas armas de entrenamiento había una chica a mi lado, yo me derrumbé por mi miedo a perder la pierna haciendo ejercicio. La chica sólo me miraba friamente, pero yo veía una realidad alternativa en la que ella me sonreía y abrazaba para consolarme; entonces le dije que sabía lo que ella estaba pensando y sonrió. Para calmarme me llevaron a una sala médica y pusieron un vídeo de una pierna literalmente reventada, le ponían un aparato en un lateral y se regeneraba completamente; añadieron a esto que en algún momento mi pierna se rompería, pero que una vez hecho ese tratamiento quedaría como nueva.