También era verano, y estaba en mi pueblo. Parece ser que era la hora de la siesta, porque hacia un calor extremo. Me disponía a ir a casa de un amigo a hacer deberes de matemáticas, pero.. antes de llegar pasé al lado de una de las iglesias de mi pueblo, y como hacía tanto calor me puse en la sombra que propocionaba ésta, y me puse a hacer ejercicios allí... pero, dentro de la iglesia escuché algo, y me decidí a entrar. Cuando entré pude descubrir que no había absolutamente nadie dentro, y que las estatuas me daban bastante mal royo, después de pasar un rato dentro de la iglesia y ver que el calor había amainado, me dispuse a irme, pero, cuando estoy a punto de salir, una cantidad bestial de personas, muchas monjas entre ellas, entraron como una estampida dentro de la iglesia, y me arrastraron de nuevo al interior. Como no me dejaban salir, vi la misa entera, pero alguien que había por allí me dejó una "game boy" y me entretuve con eso. Cuando terminó la misa me fui, pero ya era de noche, y me fui a mi casa. Cuando llegué a mi casa, abrí la puerta, y desde el piso de abajo vi que todas las luces estaban apagadas, y solo se notaba el resplandor de la pantalla de la televisión en el piso de arriba, ante esta situación, me dispuse a llamar a mi madre, y solamente contestó mi padre, que es el que se supone que estaba viendo la tele. Como no me gustaba el "ambiente" que había en mi casa me fui a casa de un amigo y cuando estaba esperando para que bajase de su casa, salió una vecina de en frente de su casa, una mujer mayor que reconocí, ya que en la realidad esa mujer era vecina de la casa a la que iba al principio del sueño, pero la casa no correspondía con aquella mujer, se me acercó y me dijo..."mira aquella luz del cielo"... y yo... "es una farola", y ella insistía que mirase, yo al final vi algo, una lucecita blanca que se movía, pero no le quise dar importancia. Acto seguido, aquella mujer, se convirtió en una especie de serpiente, pero con características de dragón, me cogió en volandas, y me tiró contra el suelo desde una gran altura y me descuartizó, después salia una visión de la mujer esa viendo mis trozos de cuerpo esparcidos por el suelo.
Fin de sueño.